"Por esto, mis amados hermanos, todo hombre sea pronto para oír, tardo para hablar, tardo para airarse; porque la ira del hombre no obra la justicia de Dios". Santiago 1:19,20.
OÍR PRIMERO
LENTO PARA HABLAR
Y MUY LENTO PARA AIRARSE.
Si estás enojado por algo, en lugar de dejarlo flotar como una nube oscura sobre tu vida, conviértelo en algo positivo. Ora por los que te lastiman y te maltratan, perdónalos y conviértete en una bendición para ellos. Probablemente no sea fácil al principio, pero cuando tomes la decisión y la sigas Dios se encargará del resto.
A veces, la raíz de la ira proviene de las características de los hogares en los que crecimos. Las personas enojadas a menudo provienen de familias enojadas, porque aprenden de sus modelos y siguen el mismo comportamiento en su vida, y finalmente se lo transmiten a sus hijos.
A veces la ira puede ser el resultado de necesidades no satisfechas o de los celos, como fue el caso de Caín, que lo condujo al asesinato de su hermano.
Quizá tengas una buena razón para estar enojado, pero no la utilices como excusa para seguir así. No niegues el motivo real ni trates de justificarlo. Más bien, pídele a Dios que te ayude a resolverlo en forma positiva.
El apóstol Pablo nos da un buen consejo: “No seas vencido de lo malo, sino vence con el bien el mal” (Rom. 12:21).
Todos tenemos cosas que nos hacen enojar, incluso hasta el punto que nos duelen. Y, en algunos casos, probablemente tengamos motivos reales para estar enojados.
La pregunta es: ¿Cómo hacer, mediante el poder de Dios, para impedir que ese enojo nos haga sentir miserables a nosotros mismos y a los que nos rodean? ES/2T/2019
EL ENOJO es la causa de grandes males en este mundo.
Primero se actúa, luego se piensa. Muchas veces con remordimiento
y pesar por lo hecho y dicho.
A veces son errores que trascienden la libertad misma.
Cuantos maltratan a sus hijos o están preso por no haber sabido controlar el enojo. Asesinaron por la ira.
La teoría es muy hermosa. Pero vivirlo y dominarse en ese momento cuando llega la ira. Es trascendental.
Es menester poner en practica todo lo dicho en este material.
Solos no es posible. Pero tampoco Dios no hará mucho, sin nuestra cooperación.
RECUERDA LOS PASOS PARA VENCER EL ENOJO IRRACIONAL:
OÍR – HABLAR-AIRARSE
26 Airaos, pero no pequéis;
no se ponga el sol sobre vuestro enojo,
27 ni deis lugar al diablo. Efesios 4.
La ira en si no es malo; lo malo es la ira irracional que es obra del mal. La ira en si puede ser una motivación para lograr algo bueno.
Oír Primero, y luego de analizar y reflexionar sopesando los pros y los contras, luego hablar y muy lentos para enojarse.
PARA VENCER LA IRA, también es importante la INFORMACIÓN Porque gracias a ello, sabremos qué hacer en ese momento oscuro, cuando llegue la ira.
NUEVA INFORMACIÓN de todo lo que remplace nuestra información que activa la ira descontrolada.
Información que será la base para EL DOMINIO PROPIO
y luego para la PACIENCIA, para la PIEDAD,
y luego para el AFECTO FRATERNAL Y AMOR. 2 Pedro 1:6,7.
Todo este proceso es posible.
Una vez habituados será posible vencer.
Dios te bendiga y le des la cooperación
para que haga de ti una nueva persona. Amen.
Ministerio Hno. Pio
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